
Miembros participantes:
Clay Gillespie, CFP, CLU, miembro de MDRT desde hace 23 años y segundo vicepresidente de MDRT de Vancouver, Columbia Británica, Canadá
Twyla Dawn Hardham, CFP, miembro de MDRT desde hace siete años de Kelowna, Columbia Británica, Canadá
Barbara A. Pietrangelo, CFP, ChFC, miembro de MDRT desde hace 27 años de Ada, Michigan, EUA
En un webinar reciente de MDRT, estos miembros de MDRT conversaron sobre algunos de los desafíos a los que las mujeres se enfrentan en general, tanto financieros como de otra índole, relacionados con la planeación de la jubilación (si deseas ver el episodio completo, visita mdrt.org/retirement-challenges-for-women).
Pietrangelo: Me estoy dando cuenta de que las mujeres en general viven más que los hombres, entre siete y diez años más, y como nosotras a menudo abandonamos nuestra carrera durante un tiempo para cuidar de nuestra familia, nuestros sala- rios son menores y tenemos menos ahorros para la jubilación. Las mujeres tienen más probabilidades de estar solas cuando se jubilan, por lo que el problema radica en los cuidados. Una de las frases que oí cuando era asesora novel fue: “La única mujer que va a cuidar de la mujer mayor que serás es la mujer joven que eres hoy”. Muy a menudo, las mujeres cuidan de sus hijos, nietos, padres y hermanos, y luego se quedan sin dinero y no hay nadie que cuide de ellas. Por ello, les recomiendo a las mujeres que elaboren un plan en cuatro pasos: Fijar objetivos, priorizar esos objetivos, pasar a la acción y revisar con regularidad. A veces lo difícil es pasar a la acción, porque oyes una cosa en Internet, otra de un amigo, otra en el trabajo y, al final, la gente tiende a no hacer nada. Pasar a la acción y revisar con regularidad es de particular importancia para las mujeres.
Gillespie: Las matemáticas de la jubilación y la esperanza de vida son muy importantes para las mujeres. Calculamos que una mujer tiene que ahorrar entre un 8.5 % y un 9.5 % más que un hombre para tener el mismo nivel de vida durante toda su esperanza de vida. También se ve en los productos. Si compras una renta vitalicia, las mujeres obtienen un importe inferior al de los hombres, quienes generan más dinero a menor precio durante su esperanza de vida.
Les sugiero que escojan de tres a seis meses de estados de cuenta de tarjetas de crédito y bancarios y que analicen en qué gastan su dinero realmente. Los cargos y los estados de cuenta no mienten.
—Barbara Pietrangelo
Hardham: Si quieres diferenciarte de la competencia, dedícate a entender qué necesitan las mujeres que te buscan y qué les quita el sueño. Barbara hizo un trabajo excelente sobre la diferencia salarial entre hombres y mujeres, la mayor esperan- za de vida y las interrupciones de la carrera profesional para cuidar a otras personas. Yo formo parte de esa generación sándwich. Tengo nietos y he tenido que cuidar de mis padres. Así que entender esta situación y haber pasado por ella me ha dado una perspectiva completamente diferente cuando me reúno con mujeres y empatizo con las cargas y los retos que afrontan. Creo que los asesores necesitan personalizar el contenido para las mujeres y decir: “Estas son las cosas que son específicas para tu caso”. Clay hizo un gran trabajo al hablar de los números, y es realmente crucial que mostremos que no es lo mismo para los hombres que para las mujeres. Me gusta abordar los retos específicos a los que se enfrentan con temas como el presupuesto, el ahorro y entender cómo las afecta su puntuación crediticia. Cuando me reúno con un matrimonio, a menudo el marido dice: “Oh, ella no se ocupa de las finanzas, así que iré yo a la reunión”. No permito que eso ocurra en mi negocio. Respondo: “No. Tu esposa tiene que venir, y tenemos que sentarnos como un equipo para que todos entendamos lo que está pasando”. Entonces vamos directamente a lo básico y nos aseguramos de que ella haya establecido su calificación crediticia. Con frecuencia, descubro entre mis clientes de más edad que las mujeres a veces no han establecido una calificación crediticia porque su marido lo hizo todo. Se trata simplemente de desvelar esas cosas que hay que abordar antes de que sea demasiado tarde cuando su cónyuge fallezca y la mujer no haya establecido dicha calificación.
Gillespie: Nunca he dejado que los clientes se reúnan conmigo por separado y no juntos. La dinámica es interesante, porque los hombres miran su esperanza de vida y piensan que lo único que necesitan es un plan familiar, así que tenemos que plantear el tema de la esperanza de vida conjunta, que es la que nos preocupa. Bromeo diciéndoles: “No me preocupo por usted, señor Smith, porque su esposa va a vivir diez años más que usted. Es ella la que más me preocupa”. Es importante que entiendan bien ese punto en su planeación, para que los clientes sepan que hay una diferencia, aunque sean una pareja casada. Hay más cosas para las que hay que prepararse más allá de la esperanza de vida masculina. Una de las frases que digo cuando trato con clientes es: “Los amigos y la familia te dan consejos bienintencionados, pero malos. Mi trabajo consiste en darles información. Ustedes pueden tomar una decisión con conocimiento de causa, pero si mis consejos les gustan o no, no depende de mí”. Así que les digo que soy una persona que da consejos. Estoy ahí para darles consejos para que puedan tomar una decisión con conocimiento de causa.
Hardham: También debemos animar a las mujeres a que empiecen a planear su jubilación lo antes posible. Recuerdo que, cuando empecé, era madre soltera y estaba en números rojos todos los meses; no tenía dinero. Probablemente el mejor consejo que me dieron fue: “Haz algo”. Así que hice algo sistemáticamente. Ahorraba $25 USD al mes. Recuerdo que $25 USD al mes era mucho para mí, pero me comprometí a hacerlo a pesar de que el presupuesto no tenía sentido. Pude aumentar mis ahorros, y luego me convertí en asesora. Vi el poder de la capitalización temprana. Animo a las mujeres a ahorrar a largo plazo y sistemáticamente. También hacemos planes para los gastos a futuro, como los del cuidado de la salud, y hablamos sobre retrasar la Seguridad Social o el Plan de Pensiones cana- diense. ¿Tiene sentido cobrar los ingresos ahora o retrasarlos y cobrar una cantidad mejor en el futuro, durante la jubilación? Además, las rentas vitalicias están volviendo al mercado. Me alegra verlo, ya que el aumento de los tipos de interés está teniendo un buen efecto. Las rentas vitalicias son algo que creo que deberíamos reconsiderar y empezar a incluir en las carteras de las mujeres, así como esos productos de ingresos garantizados. Actualmente hay muy pocos, pero creo que si podemos colocar una parte de la cartera en esos productos, desaparecerán algunas de las preocupaciones. Asimismo, debemos coordinar los planes conyugales para maximizar los beneficios, realizar revisiones periódicas, ajustes y asegurarnos de que van por buen camino y ver cómo lo estamos haciendo.
Pietrangelo: Cuando se trata de ayudar a las mujeres a planear su futuro, una de las cosas más importantes es saber cuántos ingresos van a necesitar cuando se jubilen. Me he dado cuenta de que muy poca gente sabe hacer presupuestos. Por eso les sugiero que escojan de tres a seis meses de estados de cuenta de tarjetas de crédito y bancarios y que analicen en qué gastan su dinero realmente. A veces la gente se queda estupefacta al ver cuánto gastan en salir a comer, en cuidado personal o en una variedad de cosas, como cuánto les dan a sus hijos. Los cargos y los estados de cuenta no mienten. Te muestran cómo gastas realmente tu dinero. Creo que eso es importante para intentar ayudar a la gente a tener un control que posiblemente le ayude a liberar algo de dinero extra para una póliza de seguro de vida, algunas pólizas de cuidado a largo plazo u otras similares. Hablando de eso, hay aproximadamente un 43 % de posibilidades de que todos necesitemos servicios asistenciales a domicilio. Siempre digo que espero que sean otras personas quienes los necesiten y no nosotros, pero es posible que todos necesitemos algún tipo de cuidados. Cada vez nos encontramos con más casos así, de modo que uno de los mayores regalos que puedes darle a tu familia es tener un plan para eso.
Contacto
Clay Gillespie clayegillespie@gmail.com
Twyla Hardham twyla@shfinancialsolutions.com
Barbara Pietrangelo barbara.pietrangelo@gmail.com